El sueño de hacer de la Quiropráctica algo grande, de crear confianza en la profesión, de educar, de fidelizar. Así, en junio del 2018 se constituyó la Red de Investigación de Quiropráctica (RIQ), un organismo cuyo principal objetivo era el de impulsar proyectos de investigación que evidenciasen de manera científica los beneficios de la Quiropráctica. Estas investigaciones fueron lideradas por Dña. Arantxa Ortega, Licenciada y Doctorada en Bioquímica y Biología Molecular, y su alcance y repercusión fueron de tal índole que en 2019 el RIQ llegó a integrarse en la Cátedra Internacional de Investigación de Salud Músculo-Esquelética que contaba con Canadá y Francia entre sus socios.

Pronto nos dimos cuenta de que con esfuerzo e ilusión nada nos detendría en nuestro empeño y que el proyecto podía ir a más, ¡tenía que ir a más! Así, en septiembre de 2021 dimos el paso y la Red de Investigación de Quiropráctica (RIQ) se transformó en el Instituto para la Investigación en Salud Vertebral (IISV). 

Esta transformación obedecía al deseo de querer llegar a más gente abarcando más áreas, además de la investigación, a través de las cuales poder promover el conocimiento, la sensibilización y la comprensión, tanto en la sociedad como en los poderes públicos, de la Quiropráctica como disciplina de la Salud y entendida como Salud Vertebral. 

El Instituto para la Investigación en Salud Vertebral (IISV) se creó bajo la entidad jurídica de Organización Sin Ánimo de Lucro y por tanto su objetivo fue el de revertir los fondos obtenidos a favor de nuestra gran familia Quiropráctica para hacerla crecer e impulsarla como se merece.